Si algo le apasiona a Érika Rohenes Weeber es la moda. La empresaria se ha destacado por muchos años en este sector y hoy se muestra como presidenta ejecutiva de la edición 2024 en el Congreso Latinoamericano de la Moda, Ixel Moda, que finaliza este viernes en Barranquilla.  

Con este evento que integra la moda con otras industrias creativas, Rohenes Weeber busca ayudar a la reactivación económica y turística de la ciudad que la adoptó y que ve como pionera de la moda. 

“Esto se dio por una invitación que nos hizo la Alcaldía de Barranquilla, porque a través de su programa ‘Barranquilla es Moda’, este gobierno está muy interesado en volver a darle impulso al sector en la ciudad. A volverlo a poner en el foco internacional como se lo merece, porque esta es la cuna del diseño y la moda en Colombia”, indicó a Zona Cero.  

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Esta edición de Ixel Moda, además, de estar encaminada a este sector, también tiene como temática principal la importancia de la moda sostenible.  

“Este encuentro que articula industria, gobierno y academia, hace que de alguna manera se le dé plataforma al talento local. Y así fue como logramos que Ixel se uniera con la alcaldía y con ‘Barranquilla es Moda’ para sacar adelante esta iniciativa que también destaca la moda sostenible en la ciudad", puntualizó.

Érika Rohenes Weeber destacó la pasarela de inauguración del Congreso Latinoamericano de la Moda, liderado por Francesca Miranda, como un homenaje a los 100 años de historia de la moda en Colombia.  

“Incluimos otros personajes como Amalín de Hazbún, Alfredo Barraza, Federico Molinares, Beatriz Camacho, que es una diseñadora que, a pesar de haber nacido en Cartagena, la sentimos más barranquillera que cualquier otra. Estamos conectados con todo ese círculo y Barranquilla es una ciudad que se presta porque es fashionista”. 

Para la empresaria, Barranquilla es sinónimo de brillo y fantasía, pues desde hace mucho tiempo comenzó a ser pionera en la industria.  

“Somos puerto de muchas cosas maravillosas. Nuestras modistas hacen gala a su creatividad desde 1920. A partir de ahí surgieron figuras como Silvia Tcherassi que nos llevó a focos internacionales. Hoy en día son muchos los diseñadores emergentes que están trabajando ya preocupados por el medio ambiente”, manifestó.  

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También destacó como la moda ha evolucionado a través de los años siendo que “ya no se usan esas dos colecciones, primavera-verano, otoño-invierno, sino que ahora son cápsulas atemporales que se están todo el tiempo generando. Los jóvenes hoy quieren ver la colección en pasarela y al día siguiente estarla comprando”. 

“La moda es una industria fascinante, que le coquetea a los que le gustan, que seduce, pero es difícil, es un camino largo, difícil. Cuando uno hace propuestas de calidad, se logra ganar un espacio y ese espacio tiene un mérito y vale la pena luchar por ese sueño que se tiene de proponer algo distinto en la moda”, añadió.